Parque en plena Plaza de Lepanto, una plaza con innumerables sombras y muchísimos bancos donde disfrutar de ellas. El único problema será en verano, cuando el suelo irradie un calor sofocante propio de las plazas abiertas de losas que abundan en la provincia de Sevilla.

El parque consta de una superficie vallada donde coexisten una zona infantil y un área de actividad física de zonas mayores. Ambas sobre un suelo de caucho colorido y bajo la sombra de dos árboles de hoja caduca de buen porte.

La zona infantil es bastante completa, disponiendo de elementos para niños y bebés, que pueden ser vigilados desde fuera del parque cómodamente gracias a tres bancos bien orientados.

En las inmediaciones hay una fuente de agua, lo que es de agradecer.

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